Así como si nada, como si todo… no entiendo
bien de qué se trata, nada es lo que parecía y se pierde el impulso de vida que
soplaba a todo viento, que arremetía y metía aquellas ganas de vivir. De pronto
no hay nada, pero la sensación, no es de vacío sino de ser el centro del ojo de
la tormenta.
Así como si nada, como si todo… me han dejado
sola las ganas, las voluntades, el cansancio me come el cuerpo y el alma está
encapsulada, atascada, y ya sin ganas de querer dejar la burbuja que como si
tuviera con qué, la ata. Ata el alma, la vida. Ata y amansa, no por templanza
sino por miedo…
El espíritu se queda sin aliento, sabiendo que
ahí está listo para salir, cuando la burbuja se pinche y las ataduras se
conviertan en alas, de la nada, así como si todo… así como si nada.